Los estamos mirando
por Adolfo "Fito" Correa (periodista)
El primero de marzo, con el mensaje presidencial se han puesto en marcha las sesiones ordinarias del Congreso Nacional, para el año 2010, año del Bicentenario de la Revolución de Mayo, aquella gesta histórica que culminaría 6 años después con la declaración de nuestra independencia, abandonando definitivamente el oprobioso régimen colonial. Las sesiones de este año, serán no solo importantes por esta conmemoración, que nos pertenece en particular, sino también, por la profunda crisis mundial de la que se anuncian mejorías poco demostrables, desde que los índices de desocupación son atroces en los países más desequilibrados del sistema. Por un sinnúmero de razones, nuestro país ha tenido solo coletazos de ese formidable crack, pero nada hay definitivo, y habrá que seguir atentos y una buena parte de ello, corresponderá a nuestros legisladores, que en su labor deberán tener un ojo aquí y otro allá, para bien servir a nuestro país en librarnos de los efectos más nocivos de la crisis, en cuanto sea posible hacerlo. Por lo pronto, digamos que el comienzo no ha sido muy auspicioso. Nuestro Congreso, refleja este año, una nueva composición, fruto de las últimas elecciones, lo que le ha transferido una mayor cuota de responsabilidad a la oposición, y que no terminan de asumir. En su empeño por ser alternativa de poder, se han entregado a la tarea de oponerse a diestra y siniestra, a todo, sin el más elemental ejercicio de argumentar y proponer, que sería lo correcto. Están abroquelados en una conjunción tan llena de crispación y disidencia, que solo pueden ponerse de acuerdo en algo…¡¡en oponerse¡¡ y san se acabó. Los episodios suscitados, a propósito del pago de la deuda externa y la presidencia del Banco Central, han sido tan vergonzosos, que de seguro ellos mismos se apresuraran, dentro de unos meses, a quemar todos los diarios donde han vertido sus "opiniones" descalificantes, de escasos argumentos y sin la más mínima cuota de la responsabilidad que les cabe, por el presente y sobre todo…¡¡por el pasado!!.
Señores aspirantes, con justos derechos, a suceder al actual gobierno, queremos decirles.. …¡¡Que los estamos mirando¡¡ Esperamos de ustedes, que sepan ponerse a la altura que les corresponde, que asuman de una buena vez la responsabilidad que les han conferido quienes les votaron, que ob- viamente no fue para la oposición ciega. Habrá que imaginar, discutir, corregir y proponer, pues estamos todos subidos al mismo barco, y nadie querrá que naufrague…¿ o si?. Hagamos política de estado, con altura y conviértanse en serio en una alternativa potable, sepan… ¡¡Qué los estamos mirando!!
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